Haití


imagen extraída de Tiemposur.com.ar

La tierra se agita en un escalofrío. Las piedras dilapidan vidas.


Mientras no miramos, nos creemos buenas personas, cuando una tragedia nos hace mirar, nos volvemos buenas personas. Siempre llegamos tarde a ser buenas personas y mientras algo nos ha hecho mirar, lo somos, tarde, pero lo somos. Por desgracia, el tiempo y el egoísmo nos pone de nuevo en el lugar de partida, olvidando mirar, para volver a llegar tarde la próxima vez.


Las palabras solo sirven para consolarse a uno mismo, las acciones, para ser mejores. Nuestro consuelo no da pan, solo ciega más nuestro espíritu. Consolarles es la consecuencia del error de nuestra ceguera.


Las emociones nos hacen reaccionar en momentos determinados, pero no debería ser así, porque las emociones son la base de la humanidad.
¿Qué las esconde?
¿Quizá el raciocinio, afectado por el egoísmo y el temor al dolor que a veces supone sentir?


Que bello sentir, que bello ser humano, que bello serlo siempre, que bello actuar en consecuencia.


Estas palabras no pretenden ser consuelo, sino acción, aunque puedan sonar a ello.

2 comentaris:

Quan tot va fent el seu curs ens mostrem egoistes i només pensem en nosaltres i els nostres maldecaps. Però quan passa alguna catàstrofe d'aquestes dimensions, deixem els nostres maldecaps per "ajudar" amb el què es pugui a les persones afectades sempre que sigui possible.

 

Ens ho mostren pero de vegades en ho fan veure llunya.

 

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